Diseñada como un perímetro de seguridad primario con estilo arquitectónico, la impresionante puerta de entrada de hierro prioriza la tecnología anti-intrusión sin comprometer la estética. El panel de la puerta está construido con acero resistente al desgaste AR500 de 6 mm de grosor, capaz de soportar cortes, palancas y golpes, mientras que los elementos decorativos como volutas de hierro forjado o patrones cortados con láser se integran con refuerzos de acero ocultos. El sistema de cierre cuenta con un mecanismo motorizado multipunto con pestillos en la parte superior, inferior y laterales, controlado por un sistema de control de acceso (RFID, biométrico o aplicación para smartphone). El cilindro de la cerradura está protegido por una placa de acero endurecido, y la placa de fijación está incrustada en el marco con tornillos de 150 mm de largo. Las bisagras son unidades a prueba de manipulación con pinchos resistentes a la cisuración y placas anti-palanca, construidas con acero endurecido (55HRC) para resistir ataques. Medidas adicionales de seguridad pueden incluir insertos de acero balístico (calificación NIJ IIIA), ventilaciones anti-explosión o sensores de vibración que activan alarmas cuando se intenta manipularla. Los tratamientos superficiales son recubrimientos epoxi duraderos en tonos neutros, con motivos arquitectónicos opcionales o logotipos de empresas. Esta puerta es esencial para instalaciones gubernamentales, centros de datos o complejos residenciales de alta seguridad, proporcionando una entrada segura e imponente.