Diseñada como un perímetro de seguridad para áreas de alto riesgo, esta puerta integra goznes reforzados con tecnologías antiintrusión. Los goznes son unidades pesadas con pasadores resistentes a la cisura y placas antiarranque, construidos en acero endurecido (50HRC) para resistir cortes o impactos. El panel de la puerta presenta una estructura compuesta: placas exteriores de acero (6 mm de grosor), capas internas de nailon balístico y núcleo de panal para absorción de energía, resistiendo intrusiones forzadas y amenazas balísticas (NIJ IIIA). Los sistemas de bloqueo incluyen mecanismos multipunto con cerrojos motorizados, controlados por lectores biométricos (huella dactilar, escaneo de iris) o tarjetas RFID cifradas. La puerta está equipada con sensores (de vibración, térmicos, acústicos) que activan alarmas cuando se manipulan, e integra redes de CCTV y control de acceso. Los acabados superficiales son recubrimientos epoxy duraderos en colores neutros, con características opcionales antiexplosión para infraestructuras críticas. Esta puerta es esencial para instalaciones gubernamentales, embajadas u compounds residenciales seguros.